Las mamas son las glándulas fundamentales de la lactancia materna que caracterizan a la mujer y se ubican en pares una a cada lado del tórax. Presentan tamaño, forma y consistencia muy variables entre una mujer y otra. A pesar de ser una característica diferencial de la mujer, en el hombre se presentan como vestigios atroficos que pueden dar origen a las mismas enfermedades que en la mujer.
Su estructura anatómica e histológica es como se describe a continuación:
El tejido glandular en cantidad variable se encuentra constituido por múltiples acinos, que tienen la forma de alvéolos muy pequeños o «sacos» de los cuales se originan delgados conductos que poco a poco van clofluyendo entre sí para dar origen a ductos cada vez mayores constituyendo una compleja red que termina en el conducto principal o «galactoforo» en el pezón. Esta estructura se puede denominar lóbulo mamario, y dentro de él se encuentras los lobulillos mamarios. En cada mama pueden encontrarse de 14 a 24 lóbulos, y a nivel del pezón se encuentran tantos orificios como lóbulos mamarios existan. Realizando una comparación de la estructura morfológica de la mama, podemos decir que se parece a un racimo de uvas, donde cada uva representa un lobulillo en el cual hay muchos acinos responsable de la producción de leche materna, la cual es excretada hacia el tallo principal del racimo, por donde sale al exterior.
Toda esta estructura celular se encuentra rodeada por gran cantidad de tejido de sostén o intersticial, con múltiples células y fibras colágenas así como tejido adiposo. Hacia la parte anterior de la mama, se produce la confluencia de todos los conductos principales en el pezón, el cual se presenta como una estructura bien diferenciada y muy especializada que junto a la areola constituye el llamado complejo areola pezón.
Desde el punto de vista histológico, la mama esta constituida por 5 tipos fundamentales de tejido:
1) El tejido lobulillar donde se encuentran las células que producen la leche materna.
2) El tejido ductal que recubre todos los ductos que transportan la leche materna hacia en pezón.
3) El tejido intersticial que rodea las estructuras glandulares.
4) El tejido adiposo, y
5) La piel.
La función de la mama es fundamentalmente la producción de leche para la lactancia materna por lo que desempeña un papel fundamental en la maternidad y el desarrollo de la relación madre – hijo, pero además juega un papel primordial para la sexualidad y la reproducción. El complejo areola pezón es una zona muy inervada, con una rica distribución de fibras musculares lisas que le confieren una propiedad eréctil para facilitar la succión del niño y la estimulación sexual. Ademas la mama forma parte de la imagen corporal de la mujer y definitivamente juega un papel importante en su autoestima y en el rol de la mujer en la sociedad. Por esta razón, las enfermedades mamarias tiene una connotación social y psicológica de gran interés, y su impacto sobre la paciente y la comunidad es mayor que el de otras enfermedades.
Configuración anatómica de la mama.
Se observa el tejido mamario en el centro rodeado por tejido adiposo e intersticial.
Estructura funcional del lóbulo mamario.
Se observan los lobulillos, los ductos menores y el conducto galactóforo desembocando en el pezón.